De planta rectangular,
con bóveda de medio cañón y capilla
mayor de planta cuadrada, con
arcos ciegos en los laterales y cúpula sobre pechinas. Tras el altar se
abre el camarín del Cristo, también
de planta cuadrada y cúpula. A los
pies del lado de la epístola presenta una pequeña habitación con cúpula que
hace el oficio de trastero, aunque antes fue la sacristía. Todas estas cúpulas aparecen trasdosadas al exterior y
la nave se cubre con un tejado a dos aguas de ladrillo.
La fachada está coronada por una sencilla espadaña y la
puerta presenta un vano con arco de medio punto. En los extremos de la
fachada se localizan contrafuertes, que también se sitúan en los muros laterales.
Ermita del Santo Cristo. |
Gran subida hasta llegar a la ermita. |
Vista lateral. |
Fotos: David Téllez