Algunas de estas cuevas han sido adaptadas a viviendas, hoy abandonadas. Aún visibles, unas tres, se encuentran situadas a unos cuatro metros sobre el terreno de acceso, pero éste se lleva a cabo por pozos que los comunican con el poblado musulmán situado en la meseta.
Fuente : Lorenzo Cara Barrionuevo y M.ª Juana Rodríguez López