El castillo cristiano (s. XV) de Tahal se componía de una gran torre cuadrangular, que estaba originalmente en el centro de un cuadrado fortificado con torres circulares en cada esquina, vino a superponerse a una posible fortificación islámica. Se conserva la Torre del Homenaje y algunos elementos defensivos como el talud y las almenas. La Torre del Homenaje es un edificio exento de planta rectangular de 187 metros cuadrados con cuatro fachadas de mampostería perforadas por pequeñas ventanas irregularmente distribuidas, coronadas por escasas almenas puntiagudas. Además, está reforzada con maderas empotradas, y rematada probablemente con una capa de yeso. Se levanta sobre un basamento de muros en talud. La cubierta ha desaparecido.
Esta fortaleza jugó un papel efímero durante la guerra de los Moriscos, entre los años 1568 y 1570 . |
Interiormente, se divide en tres plantas con cuatro estancias por planta, formadas por dos muros en cruz en el centro de la planta rectangular. De los forjados sólo se aprecian los huecos en el muro de apoyo de la estructura de madera. Se accede desde un hueco exterior elevado 2,5 metros de altura.
Todos los muros son de mampostería, presentando exteriormente la textura de la piedra vista. Al interior se conservan grandes paños revestidos de mortero de cal. Los dinteles de los huecos son de madera, por lo que han desaparecido en su mayoría.
Como construcciones anejas en el lado noroeste se aprecian restos de otra torre más pequeña de planta circular, perteneciente al recinto murado que protegía a la Torre del Homenaje, y se ha descubierto un aljibe sobre el basamento.
Cabe mencionar que en 1489 durante la reconquista de la ciudad de Almería, los Reyes Católicos hicieron noche en la fortaleza. |
Entrada al Castillo. |
Tahal fue durante la Reconquista un importante punto de paso y de control entre el Valle del Almanzora y Tabernas. |
Fotos de: David Téllez