La torre se encuentra cerca de El Hijate, en el término municipal de Alcóntar.
Construida en época nazarí, su función era vigilar, defender y avisar en caso de ataque a los pueblos vecinos, en este caso a la torre de Somontín (al sur) y a la de Caniles (al norte). Se comunicaban con señales de humo o reflejos de espejos.
Su estructura es de planta circular, construida en piedra. El acceso se realizaba por la parte superior, donde se llegaba con una escalera de madera. Actualmente ha desaparecido la cubierta y parte del muro de coronación debido a las duras condiciones meteorológicas de la zona y el paso de los años. Esta torre actualmente se ha recuperado como mirador en el municipio de Hijate.
Cuenta una leyenda, transmitida por Pepe Blanque, que la Torre no tenía la misión de defensa si no que los moros escondieron en ella un tesoro. Este hombre gastó todo su dinero excavando y buscando el tesoro, pero desgraciadamente, no encontró nada.