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martes, 1 de diciembre de 2020

Federico Castellón Martínez


(Alhabia, 1914 - New York, 1971).


Pintor y grabador nacido en Almería, desarrolla prácticamente toda su vida en EEUU. Llega a Nueva York junto a su familia en 1921, asistiendo tres años a la escuela de pintura Erasmus High School. Posteriormente aprende en el estudio del pintor mejicano Diego Rivera, quien medió ante el gobierno español para que le concediesen una beca para estudiar en Europa. Su desarrollo posterior le crea una formación autodidacta y recibe, desde el principio, un reconocimiento artístico de primer nivel. Pintor de estilo surrealista muy influenciado por Salvador Dalí, también fue escultor, ilustrador, profesor...

      Regresa esporádicamente a España, recibiendo una beca de la República en 1933. En 1934 expuso en Almería, con una tendencia surrealista no bien entendida por el ambiente de la época. Participó en 1935 en la Exposición Internacional de París de los artistas españoles, que incluyeron Pablo Picasso, Juan Gris y Joan Miró. Tras ella, retorna definitivamente a EEUU, donde adoptó la ciudadanía norteamericana en 1943.

      En 1936 su obra formó parte de la Exposición presentada por el Museo de Arte Moderno de New York bajo el título “Fantastic Art, Dada and Surrealism” y, en 1944, de la organizada por el Art Institute of Chicago titulada “Abstract and Surrealist American Art”. Desde 1937 se dedicó a las artes gráficas, fundamentalmente litografías y aguafuertes, siendo un perfeccionista en términos de su técnica, del uso de colores sutiles y de las imágenes surrealistas, misteriosas, con figuras alargadas características, asomando siempre entre los sueños y las pesadillas. Entre sus trabajos de la ilustración destacan La mitología del Bullfinch, La historia del polo de Marco, El pequeño príncipe, y la serie De la epopeya del hombre.

      Siempre gozó del favor del público y la crítica americana, impartiendo enseñanzas artísticas durante más de 25 años en New York, la Universidad de Columbia (1948-1961), Instituto de Pratt (1951-1961), etc.; siendo miembro de la Academia Nacional de diseño en New York y de la Sociedad de Artistas Gráficos americanos. Entre sus premios destacan el Guggenheim (1941), el de la Biblioteca del Congreso y el reconocimiento de la Academia Nacional. Hoy, sus aguafuertes y litografías más características se incluyen en la mayoría de las colecciones públicas importantes, tales como el Museo del Arte Moderno, la Academia de York, el Museo de Pennsylvania, Museo de Whitney del Arte Americano y del Instituto del Arte de Chicago.

      Crea un método que él llamó de «técnica lito-gráfico-elevación », empleado durante los años 60, dónde, mediante diferentes procedimientos, aporta luz a las áreas de la oscuridad, creando así más de una composición de tono y un efecto dentro de esta imagen cargada de símbolos muy atractivos.

Visita su galería en estos enlaces.

Galeriaacanto

Purakastiga

Catálogo

Fuente: Dipalme

domingo, 15 de noviembre de 2020

Carreras de Cintas

 Las carreras de cintas empezaron siendo a caballo y tienen su origen en la España del siglo XIV, inicialmente dentro de la Orden de Caballería de la Banda, fundada en 1332 por el rey Alfonso XI de Castilla.  Este Rey quiso, como manera de imponer su poder en la rebelde nobleza, que algunos caballeros formasen la Banda de Oro, una orden de tipo laico y caballeresco que vestían paños blancos con un toque carmesí diseñado por el Rey mismo y que tenían el derecho a llevar adornos de oro y plata por su condición de caballeros.

Sus miembros debían tener un toque intachable comportamiento cortesano, participar en justas, ser solidarios y leales al rey. Las normas de esas justas y las expresiones de solidaridad se recogían en los estatutos de la orden, al igual que ciertas normas de conducta. Las carreras de cintas a caballo, se inspiran, pues, en las justas y torneos medievales. Las “justas” eran los combates entre dos caballeros a caballo con lanza en mano, que se llevaban a cabo para justificar la razón o derecho de alguno de ellos sobre el contrincante.

Estas carreras poco a poco han sufrido modificaciones pasando a formar parte de los juegos populares de nuestros pueblos, Huércal de Almería, Gádor, Alhabia entre otros . Nuestros abuelos corrían las carreras de cintas con mulas o burros y buscaban conseguir la cinta de la chica que le gustaba. 

Actualmente las carreras de cintas se hacen en bicicleta y forma parte de las celebraciones de las fiestas de los pueblos.

Bédar. Años 60.


Bédar. Año 1965.


Íllar. Año 70.



http://josemurrillo.blogspot.com/.../carrera-de-cintas.html?


Gigantes y Cabezudos

 No hay nada que me guste más, que el patrimonio Inmaterial. Tradiciones, costumbres arraigadas que han vivido con nosotros desde siempre. Siempre han estado ahí incluso antes de que naciéramos. Han formado parte de nuestra vida y sobre todo de nuestra infancia. Este patrimonio debería de permanecer siempre en nuestra memoria, a pesar del paso del tiempo . Mucha nostalgia, recuerdos, sentimientos, florecen mientras escribo esta publicación .  Sólo Intento frenar a uno de sus mayores enemigos,  EL OLVIDO.

Parece ser que esta fiesta se  remonta a la Edad Media,  la  época en que  comenzaron o aparecen en las fiestas, las comparsas de Gigantes y  Cabezudos, con  la aparición de la llamada  Tarasca. Parece ser que por primera vez salió en el pueblo de Tarascón (Madrid), representando una figura  de extraña serpiente con muchas cabezas, en la que se recogían los vicios y los pecados.

En  tiempos de Felipe III se prohibió que la Tarasca entrara en las iglesias, y fue permitido que sólo se quedaran en la puerta. En los Autos Sacramentales y danzas se repartieron estas comparsas, ridiculizando las costumbres de la Corte y del pueblo.

Así en Almería, aunque no se tienen datos de su primera representación, si existe una Real Cédula de Carlos III, comunicando a todas las ciudades de su reino, la prohibición de los gigantes y las danzas en las procesiones. 

La Orden de Prohibición 

De dicho documento entresacamos lo más sustancial: "A los de mi Consejo, Presidente y oidores de mis audiencias, alcaldes, alguaciles de mi Casa y Corte y todos los corregidores asistentes, gobernadores, alcaldes mayores y ordinarios y otros cuales fueren y justicia de estos mi reino, así de realengo como los de señorío, tanto a los que ahora son como a los que serán de aquí adelante. Sabed: Que habiendo negado a mis reales noticias algunas notables irreverencias que con las fiestas del Santísimo Corpus Christi de este año, se ha cometido con ocasión de los Gigantones y demás, en donde permanece la práctica de llevarlos en las  procesiones de aquel día; y teniendo presentes al mismo tiempo las razones que el mismo Consejo me manifestó en consulta, de diez de abril de mil setecientos sesenta y dos y tratándose de los Gigantones de Madrid y lo resuelto por mí a la citada consulta en que fue servido mandar se quitasen  para lo sucesivo los Gigantones, Gigantillas y Tarascas, porqué semejantes figurones no solamente no autorizaban á la procesión y el Santísimo Sacramentó, sino que su concurrencia causaba no pocas' indecencias, por lo cual no se usaban en Roma, ni en muchos de los principales pueblos de España, pues sólo servían para aumentar el desorden y distraer la devoción de la Majestad Divina; por mi Real Orden publicada el diez de este mes he resuelto: ''Que en ninguna Iglesia da estos mis reinos, sea católico, parroquial o regular, hayan en adelante tales dantas ni Gigantones, sino que cese del todo esta práctica en las procesiones y de más  funciones eclesiásticas, como poco corriente a la gravedad y de coro que  en ellas se requiere". Recibida dicha Real Cédula en esta ciudad por su Gobernador el Conde de la puebla de los Valles, procedió a dar conocimiento de ella a los de su jurisdicción, con la trascripción de la misma, que tiene fecha 24 de agosto de 1780.

Se enviaron oficios a los pueblos de Almería, Rioja, Benahadux, Gádor, Alicún, Alhabia, Terque, Santa Cruz, Gérgal, Olula de Castro, Sorbas.- Nijar, Felíx y Roquetas. De lo que se deduce, que en tales pueblos se celebraban, también los divertimientos dé Gigantes y Tarascas.

Aunque no se tiene fecha exacta de la duración de la prohibición, no es aventurado suponer que, al limitarse la prohibición a las fiestas religiosas, sé incluiría como parte del programa en los regocijos y fiestas populares que a través de los tiempos hubiesen figurado con carácter de bullicio y sin símbolos ni alusiones, sino simplemente como regocijo de los niños en sus alegres dianas y pasacalles

¡ Vivan las fiestas. Vivan los Gigantes y Cabezudos!


Almería. Principios de los 60.

Calle Real, Almería. Año 1960.


Plaza de la Libertad o Plaza del Ayuntamiento. 18 de Agosto de 1903.

Alhabia. Año 1940.


https://www.diariodealmeria.es/.../Tradicion-Gigantes...

miércoles, 28 de octubre de 2020

Fiesta de los Quintos

 Que pena da que se valla perdiendo este tipo de tradiciones. Este tipo de patrimonio Inmaterial tiene la ventaja de que nunca muere, porque se alimenta del recuerdo. Por eso hoy quiero alimentar este patrimonio precisamente para eso, para que nunca muera. FIESTA DE LOS QUINTOS. 

Los quintos eran aquellos  jóvenes que al cumplir la mayoría de edad se iban hacer  el servicio militar. Estos quintos realizaban en el pueblo  una fiesta y realizaban una misa y procesión para despedirse de los vecinos antes de irse a la mili. 

La denominación "quinto" proviene de la obligación de realizar el servicio militar que Juan II de Castilla (1406-1454) impuso durante su reinado, según la cual uno de cada cinco varones debía servir al ejército, siendo posteriormente retomada dicha disposición por Felipe V en 1705. Previa a dicha incorporación, tradicionalmente los jóvenes de un mismo tramo de edad han celebrado la fiesta que lleva este nombre, "de los quintos", entendida como rito de paso, de masculinidad o de exaltación. 

No se dispone de documentación escrita donde aparezcan recogidos los elementos propios de este ritual tal y como se realizaba en el pasado, sólo la tradición oral que ha ido pasando de padres a hijos mantiene viva esta fiesta en la actualidad.

La celebración de la fiesta de los quintos no ha sufrido cambios importantes, a pesar de que haya desaparecido el motivo que originó su celebración. Parece que tal costumbre ha pervivido tras la eliminación del servicio militar obligatorio con un sentido más orientado a la entrada en la mayoría de edad de los jóvenes. Los habitantes del municipio de Abrucena por ejemplo han querido mantener esta celebración como un elemento destacable dentro de su patrimonio cultural. Para ello, los participantes y sus familias se esmeran año tras año en los preparativos y la celebración, a pesar del elevado gasto económico que supone afrontar tal fiesta. Cada año los familiares realizan un importante desembolso económico que actualmente se ha convertido en un elemento destacable que confiere un determinado  prestigio social.

Quintos de Alhabia, año 1985
Quintos de Cantoria

sábado, 24 de octubre de 2020

Feria del Ganado

 Hoy quiero rememorar una tradición que muchas personas la han vivido  en primera persona  y otras la recordarán como es mi caso  de oidas de abuelos o familiares. Para que nunca caiga en el olvido creo  esta publicación de esas grandes ferias celebradas con entusiasmo por los habitantes de esos pueblos de nuestra querida Almería.  Me refiero, a las Ferias del Ganado.

Las ferias y mercados en general han jugado un significativo papel social, económico y cultural en la sociedad rural tradicional española. Específicamente, las ferias y mercados de ganado constituyeron en su momento el sistema tradicional del comercio pecuario, y todavía mantienen en la actualidad su relevancia social y económica en ciertas zonas geográficas de España.

Normalmente esta feria se celebra en lugares públicos concurridos de los pueblos o ciudades y en días señalados, generalmente una vez al año, aunque en algunos sitios hay dos o tres ferias anuales. Lo general es que se celebre la feria en cualquier rodeo o descampado cercano a la población y lindante con alguna corriente de agua que sirva de abrevadero. En tal lugar suele reinar el desorden y el barullo, más o menos pintoresco, pero origen de graves males, como contagios, sustracciones y engaños de toda índole. La inspección veterinaria se efectúa con grandes dificultades y notoria incomodidad; el ganado pernocta a la intemperie o hacinado en malos y caros locales.

“El comprador observa primero la yunta que desea adquirir. El dueño no se da por advertido del espionaje. El primero, después de apreciar concienzudamente la anatomía de las reses, avanza a mayores estudios: con su vara mide la longitud de cada buey, para ver su igualdad, y la altura de las ancas para apreciar su simetría. El vendedor le deja hacer sin despegar los labios, seguro de la bondad de su ganado. Enseguida el otro palpa las orejas para apreciar su carnosidad, y abre los párpados de la res para examinar el grosor y limpieza del ojo. No deja de ver si las pezuñas son cortas, anchas y tersas, y por último, cogiendo por el hocico al animal, le obliga a abrir la boca para ver los dientes blancos, grandes y apretados. Estas operaciones se repiten una, dos, veinte veces, sin que se agote la paciencia del dueño ni la curiosidad del tratante, ni, lo que es más prodigioso, la mansedumbre del buey objeto de tantos experimentos”. La compraventa de animales domésticos originaba multitud de reclamaciones y litigios, cuya existencia entre los medios ganaderos es proverbial desde los tiempos más remotos. Las ferias de ganado, motivo de buenos negocios, eran también origen de ruinosos pleitos, y el decomiso de una res de abasto es causa de litigios sobre la persona que debe sufrir la pérdida: ganadero, tratante o carnicero. Asimismo, el vendedor tenía que garantizarle al comprador la posesión legal y pacífica de la cosa vendida, y debía responder de sus vicios o defectos ocultos, los denominados “vicios redhibitorios“, tema tratado en distintas hojas divulgadoras publicadas por el Ministerio de Agricultura, como la adjunta publicada en 1955:

“La edad puede falsearse vaciando los dientes y reconstruyendo la negrilla en el animal que ya ha cerrado, o recortando un poco los dientes. Una caballería puede hacerse pasar por de más edad arrancándole los dientes de leche. La administración de arsénico o antimonio días antes de la venta pone a los animales lustrosos y aparentemente gordos y sanos. El pelo puede también ponerse brillante, quemándolo ligeramente y planchándolo después, o bien recortándolo un poco. Un animal viejo o agotado puede tomar apariencia de más joven y de más viveza mediante la insuflación de aire o inyección de parafina blanda en las cuencas orbitarias”.

Son las ferias de año, pues, uno de los acontecimientos ganaderos que más arraigo tienen en nuestros pueblos y su celebración tiene implicaciones comerciales y económicas, al realizarse durante las mismas un elevado número de transacciones que suponen para muchas familias una de las principales fuentes de ingresos, y por otra constituyen, sin duda, uno de los signos de identidad cultural y folclórica más importantes de nuestra tierra”.

Feria de Alhabia
Feria de Vera
Feria de Cuevas de Almanzora
Feria de Gérgal
Feria de Huércal Overa.


sábado, 26 de septiembre de 2020

Puente Cortijo de las Palmeras

Construido sobre 1864. Este puente es uno de los pocos puentes que podemos encontrar en el tramo de Alhabia - Cruce del Ricaberal.







Fotos: David Téllez


Era de Alhabia

Era de unos 16 metros de radio, empedrada con cantos rodados y lajas de piedra en la zona de aventar el grano. Actualmente ha perdido el empedrado tras la última reforma.






Fotos: David Téllez


sábado, 11 de julio de 2020

Cueva la Monea

Cueva con dos bocas de acceso de grandes dimensiones visibles desde lejos. Una de las bocas pertenece al término municipal de Alhabia, mientras que la segunda boca pertenece al término municipal de Terque. 





domingo, 28 de junio de 2020

Molino de los Rodeos

Este molino fue propiedad de Baldomero Cadenas Ibañez, a quien, en 1.903 se autoriza a la instalación , en el mismo, de una fábrica de energía eleéctrica. En 1.909, se amplía la línea para dar luz a Santa Cruz, Alsodux y Alhabia, con lo cual, precisa de más energía, la fábrica es trasladada al paraje Molino Alto, junto al molino de Caniles. En 1.951, este molino es adquirido por Francisco León Ibañez, realizando importantes obras de mejora y transformación.

Actualmente ha sido transformado conservando su maquinaria y capacidad de funcionamiento.






Fuente: Alpuguía 
Fotos: David Téllez

domingo, 7 de junio de 2020

Era del Olivar Alta (Alhabia)

Era de grandes dimensiones, empedrada con piedras de diferentes orígenes. Actualmente falta parte del empedrado. Situada en el Pago del Olivar.







Fotos: David Téllez


Era del Olivar Media (Alhabia)

Era empedrada de unos 12 metros de diámetro aproximadamente en su inicio y reducida casi a la mitad  debido a la ampliación del camino circundante. De las tres eras que hay en la zona esta es la más afectada. 






Fotos: David Téllez


Era del Olivar Baja (Alhabia)

Era empedrada de unos 12 metros de diámetro aproximadamente. Conserva gran parte del empedrado así como parte del muro perimetral. 











Fotos: David Téllez

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