sábado, 17 de agosto de 2019

San Ramón Nonato

Guarda gran fervor entre la población de la pequeña pedanía de El Cariatiz, perteneciente a Sorbas, San Ramón Nonato, cuya iglesia fue construida en su honor gracias al terreno donado por un vecino influyente de la localidad y devoto del santo, conocido popularmente como "Tío Ramón Grande". Al igual que en otras celebraciones de la comarca, es tradicional el reparto de roscan de pan que las familias hacen durante la procesión del día 31 de agosto a modo de ofrenda, siendo aquí singular la asistencia de mujeres y recién nacidos para su presentación a este santo protector de las embarazadas, cumpliendo así con las promesas de éstas tras el alumbramiento. 

Descripción extendida

Orígenes documentados o atribuidos El patronazgo de San Ramón Nonato, en la pedanía de Cariatiz, surgió a finales del siglo XIX, La construcción de la Iglesia dedicada a este Santo fue posible gracias al terreno donado por un vecino influyente de la localidad, conocido popularmente como "Tío Ramón Grande". Este vecino contaba en su domicilio con una pequeña imagen de San Ramón Nonato, patrón de las embarazadas, al que había encomendado su futura paternidad. En honor a este vecino y a la gran devoción que profesaba hacia este Santo, el pueblo de Cariatiz adoptó esta advocación. Preparativos Las mujeres de Cariatiz (generalmente las vecinas del barrio de Los Alías) son las encargadas de la decoración y limpieza de la ermita, así como de la preparación del trono y de la colocación de las roscas de aceite que luce el Santo, anudadas a la cintura. Sin embargo, es la comisión de festejos, elegida anualmente, la encargada del resto de preparativos que requiere esta celebración. Entre sus principales tareas destacan recaudar el dinero para la celebración y concretar el programa de fiestas. Desarrollo En la víspera del 31 de agosto los habitantes de Cariatiz ultiman los preparativos que darán paso al comienzo de las fiestas patronales. Son numerosos los vecinos que durante todo el día acuden a la Plaza de Los Alías para colaborar en los preparativos. A las dos del mediodía, los habitantes de Cariatiz se concentran en la Plaza de Los Alías, donde tiene lugar un almuerzo popular que organiza la comisión de fiestas. Por la noche, alrededor de las once, comienza la verbena. Esta es una noche de diversión y de baile que no finalizará hasta bien entrada la madrugada. 

El día del patrón (31 de agosto) tiene lugar el ceremonial religioso. A las once de la mañana comienza la misa en honor al Santo en la Iglesia de San Ramón Nonato. Este acto se desarrolla ante la presencia mayoritaria de la población femenina, mientras que la mayor parte de los hombres esperan, en el exterior, la salida de la imagen del patrón. 

Finalizada la misa, comienza la procesión, que incluye el siguiente itinerario: salida de la Ermita de San Ramón Nonato, situada en la Plaza de Los Alías, sigue el camino con dirección al barrio de Los Martínez y a unos doscientos metros gira a la izquierda y toma la llamada popularmente calle de Las Carreras. A continuación, la comitiva inicia la subida a la calle Torreta (en dirección al barrio de Los Josefos), continúa hasta la Plaza de Arriba y toma a la derecha dirección La Fuente, por la que se accede de nuevo a la Plaza de Los Alías. El itinerario se realiza íntegramente en el barrio de Los Alías, que constituye el mayor núcleo poblacional de Cariatiz; en este espacio también se concentran los servicios públicos. Esta pedanía no dispone de un callejero urbano oficialmente aprobado donde quede constancia del nombre de las calles, que popularmente son identificadas o conocidas a través de las familias que las habitan y los inmuebles que incluyen. 

El recorrido procesional despierta gran expectación entre el público asistente, ya que durante el mismo son tradicionales las ofrendas de pan que realizan las familias de Cariatiz al paso del Santo. Todos los miembros de cada una de estas familias participan en el lanzamiento de panes a los asistentes, siendo este uno de los momentos más divertidos para los jóvenes, que de esta manera se convierte en una forma de transmisión del ritual.

La población femenina es la gran protagonista este día. Las mujeres son las encargadas de portar el trono durante el recorrido procesional. Son muchas las mujeres que, encomendadas al Santo para ser madres, cumplen su promesa este día. Es tanta la devoción femenina hacia la imagen, que nunca faltan mujeres que quieran llevar la imagen de San Ramón. A la salida del templo, los devotos le tiran monedas a modo de promesa, siendo generalmente la población femenina la que cumple rigurosamente con esta tradición.

Finalizada la procesión, comienza el reparto de las roscas de aceite que los devotos de San Ramón ofrecen al Santo. Estas roscas se anudan a la cintura de la imagen con lazos de colores, otorgándole una particular vistosidad a la imagen. Los cariaticeños se aglutinan alrededor del trono y entre empujones se afanan por conseguir un trozo de las roscas ya bendecidas, ya que su ingesta es símbolo de buena suerte y salud.

Una vez custodiada la talla en el templo, los vecinos quedan en la Plaza para continuar la celebración. Durante este día de fiesta, los cariaticeños disfrutarán de los actos programados, tales como un almuerzo popular y atracciones infantiles, que ameniza la banda de música "Santa Cecilia" de Sorbas. 
TransformacionesLa fecha de celebración (31 de agosto) y el itinerario procesional de la festividad de San Ramón Nonato han permanecido inalterables desde su instauración. Con el paso del tiempo, se han ido sucediendo cambios que, sin embargo, no han afectado significativamente a la esencia de este ritual.

Inicialmente el trono de San Ramón Nonato procesionaba en dos ocasiones (una por la mañana y otra por la tarde) con motivo de su festividad. Tradicionalmente, la población masculina era la encargada de portar el trono, estando la población femenina excluida de esta labor. El relajamiento de las normas sociales y la gran devoción que profesa la población femenina a este Santo han posibilitado que hoy en día las mujeres sean las protagonistas principales en los distintos actos que conforman este ceremonial. En el pasado las interesadas en portar el trono anudaban un lazo en las trabajaderas del trono para asegurarse su participación, pero también eran numerosas las ofrendas de pan y monedas que se hacían durante el recorrido procesional. 

Hasta la llegada de la electricidad a esta pedanía (en la década de los setenta del siglo XX), la fiesta era amenizada por la agrupación musical de viento de Bédar. Los vecinos de Cariatiz adornaban la Plaza de los Alías con hojas de taray y álamo; en este escenario tenían lugar las tradicionales "carreras de cintas" y la verbena. 

Los fuegos artificiales también han formado parte destacada del ritual. El tradicional "castillo de fuego" fue una de las atracciones más festejadas en el pasado, aunque actualmente ya no forma parte del programa de fiestas. Muchas de las transformaciones provienen del cambio generacional sufrido en la comisión organizativa del ceremonial. 

Modelo Organizativo

Organizadores 

La comisión de fiestas, nombrada anualmente, es la encargada de la organización del ceremonial en honor al patrón de Cariatiz.

Financiadores 

Los vecinos de Cariatiz sufragan gran parte de los gastos del ceremonial, a través de una cuota anual de 50€ por familia. El Ayuntamiento de Sorbas también colabora en la financiación con una pequeña aportación, y la cesión de algunos servicios (limpieza y habilitación de la Plaza de Los Alías). 

El itinerario procesional se desarrolla íntegramente en el barrio de Los Alías, centro urbano de la pedanía de Cariatiz, y la Iglesia de San Ramón Nonato y la Plaza de Los Alías conforman el escenario por el que discurre el ceremonial. 

Con motivo de las fiestas en honor a San Ramón Neonato, la procesión parte de la Ermita de San Ramón Nonato, situada en la Plaza de Los Alías, sigue el camino con dirección al barrio de Los Martínez y a unos doscientos metros gira a la izquierda y toma la llamada popularmente calle de Las Carreras. A continuación, la comitiva inicia la subida a la calle Torreta (en dirección al barrio de Los Josefos), continúa hasta la Plaza de Arriba y toma a la derecha dirección La Fuente, por la que se accede de nuevo a la Plaza de Los Alías. El itinerario se realiza íntegramente en el barrio de Los Alías, que constituye el mayor núcleo poblacional de Cariatiz; en este espacio también se concentran los servicios públicos. Esta pedanía no dispone de un callejero urbano oficialmente aprobado donde quede constancia del nombre de las calles, que popularmente son identificadas o conocidas a través de las familias que las habitan y los inmuebles que incluyen. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ENTRADAS MÁS VISTAS